Abrecaminos

Patricia
Jul 25, 2022

Entré al cuerpo como un preso

a una soga antes de ser quemado,

sólo quieta se abrió la luz en mí

cuando el amor me arrancó los ojos:

se alzó el fuego, avanzó chasqueando

sus mandíbulas de tierna bestia:

¿Hacia dónde irás ahora

que el lobo del cuento sopló

sobre tu camino de vuelta?

Si ya no soy una niña, debo

tener otro nombre: una casa

cuyo mapa no se destruya.

Cerrados a mí, todos los caminos,

hice memoria de la noche. Creí conocerla,

pero hubo otra. Y siempre habrá otra.

¿Si no hay una línea de avance

estoy condenada a una celda?

No puedo decirte cómo llegues a mí.

La última palabra fue la puerta.

Gírala sobre las brasas. Escupirá

el fuego, formará un surco a tus pies.

Si sabes llegar, la cruz te será abierta.

--

--